¿A quién le importa HONDURAS?

¿Y a quién le importa Honduras?

La sociedad del espectáculo perdió hace tiempo la vergüenza.
Un artista, un periodista deportivo, un posmo de gimnasio, simplemente con existir en la pantalla de la tele, ya se arma de un narcisismo tonto [¡ojo, es contagioso!] y se considera habilitado para hacer juicios sobre cualquier cosa trascendente y evaluar desde su ego pueril qué cosa le tiene que importar a la gente y qué no… y despacharse [perdón, iba a escribir despecharse] como lo hizo Mirta Legrand en su almuerzo del lunes posterior a las elecciones, festejando la derrota de los K, con sus invitados Pro victoriosos [más de lo que las cifras de votos en realidad les han conferido] con su gesto y su humor de emperatriz de no se qué: “¿y a quién le importa lo que pasa en Honduras..?”, dijo… e invitando a sus comensales a festejar su pavada… que lo hicieron nomás, porque a eso fueron. Y porque seguramente, y en esto son honestos, a esta gente del Pro poco le importa lo que ocurra en Honduras.
Esto lo decía Mirta, nuestra dama mediática en cuestión, a partir de una conferencia de prensa dada el día anterior, domingo eleccionario, por la Presidenta Cristina donde informaba de los graves sucesos golpistas en Honduras, aquella hermana república de América Latina.

El humor inteligente de Barone

Claro, al día siguiente, luego de las reflexiones agudas de un Orlando chispeante en la TV Pública [uno de los pocos medios que guarda una decencia identitaria] tuvo que decir, ella, la Mirta, que a ella la “malinterpretan”… pobre Mirta, ella que es tan democrática y sobre todo sensible y que se ha constituído en el modelo del sentido común de la clase media [entiéndase, no del buen sentido, humanista, sino del sentido común burgués] que nos q1uieren inocular desde esos medios, esa tele, esas radios, esos diarios monopólicos de la derecha.
Pasa aquí, pasa en toda América Latina [o casi toda] y en realidad no son nada originales; el formato es el mismo: producir imágenes, hacer montajes fragmentarios, vaciar palabras de contenido y otorgar licencia para la represión; ej construir sobre la inseguridad y la incertidumbre operaciones de miedo y desesperanza para luego habilitar la represión, la confusión, o el engaño. Justificar cualquier gestión destituyente en base a situaciones de shock [Honduras] o erosiones crónicas en base a estereotipos: la soberbia de Cristina [no la de Mirta o la de Carrió] o las sospechas empresarias del pingüino [no las certezas millonarias de De Narváez y Macri y sus pasados dudosos] y tantas otras formas que bien han sido estudiadas por los científicos sociales sobre la manera de manipular las mentes desde los medios con tal de someter o golpear a cualquier gobierno popular.

Dos realidades: la real y la otra

A propósito de las formas de apropiarse del pensamiento de la gente [ya un filósofo hablaba del hecho que no pensábamos sino que éramos pensados por el poder hegemónico] es interesante lo que la realidad nos trae como nuevas metáforas.. ¿vieron cómo mutan los virus de la influenza… cómo el mapa genético puede adaptarse e inocular en estos minúsculos entes y a su vez introducirse en nuestras nobles carnes de humanos para convertirnos en cualquier porquería..? pues bien, no diferente a ello parece ser el trabajo de quienes planifican la estrategia del dominio de las conciencias, de las mentes, inoculándonos con boberías e indecentes muestras en la tele en esto de la sociedad del espectáculo para hospedar [como los parásitos del paludismo, solo que en nuestro cerebro] y que ingenuamente pensemos una realidad que nos han construido para nuestro consumo… bien dice Mirta [y no ingenuamente sino midiendo la reacción del público como hacen los encuestadores para tirar hipótesis bélicas… como hacía Bush]: “¿a quién le importa Honduras?”
Pues bien señora, no le importará a De Narváez ni a Macri esto de los golpes y las dictaduras, que la festejaron con sus sonrisas estúpidas, pero sí nos importa a quienes estamos construyendo una sociedad donde la distribución de las riquezas y la desarticulación de la maldad están en la agenda nuestra de cada día.

A la derecha se le va la mano

¿Exagerábamos cuando decíamos que si los reaccionarios, los restauradores neoliberales, se subían al carro del triunfo vendrían por más… y más… la extorsión económica y el golpismo en el horizonte…?¿Exagerábamos…?
No. Ya el discurso de la gripe y el pánico mediático está en plena agenda del partido mediático de la derecha. Cualquier herramienta puede ser útil con fines extorsivos, erosionantes del gobierno, destituyentes, o descaradamente golpistas.
El formato es el mismo que con las retenciones de los grandes patrones de los negocios agroexportadores, o con el precio del tomate… o el dengue… [¿recuerdan?] o la inseguridad… o la sequía… La novela es la misma… y el propósito también: producir escepticismo, decepción, desconcierto: MIEDO + DESESPERANZA, la gran fórmula.
Al mismo guión se le cambia la palabra y la imagen visual. Que según expertos la pandemia estaría “mal manejada en nuestro país…” y que según fuentes bien informadas… y según diarios prestigiosos del mundo [¿les suena esto de destruir nuestra autoestima que precariamente hemos ido fortaleciendo estos últimos años a pesar de la acción mediática dominante del privilegio económico..?]

Y no hablemos solamente de la realidad mediática manejada desde Buenos Aires; ayer en TSN y radio La Costa pasaban un repertorio de llamados de vecinos de la Villa balnearia y algún otro barrio donde alguna ciudadana muy paqueta [¿vieron los oyentes de la Radio Continental…? bueno, igual pero parroquianos nuestros, de aquí, de Necochea y Quequén] decía: “¿y qué dicen ahora los del Frente para la Victoria y los del Partido Verde que lo llevaban a Kirchner como candidato… por qué no renuncia la presidenta… y en vez de viajar a Honduras por qué no manda la plata para remedios..?”

¿Es que se está armando un monopolio mediático en Necochea?

Interesante para nosotros, los que no renunciamos a nuestro pensamiento progresista, democrático y emancipador [a pesar de Rozitchner, no el padre, el talentoso, sino el hijo, el heredero del apellido de filósofo] estudiar más profundamente el fenómeno regional de los MEDIOS; separar la paja del trigo, lo bueno de lo malo, lo honesto de los deshonesto, la crítica de la mentira, el des-velamiento de la verdad versus el ocultamiento, la alienación y la mentira.

A no retroceder pues con el reclamo de una nueva Ley de Medios Audiovisuales; sigamos interpelando a la sociedad, a los partidos políticos y al gobierno para que cuanto antes entre en la Legislatura y sea debatida. Sin medios democráticos no podremos fortalecer la democracia en Argentina y en América Latina y mucho menos avanzar en un proceso de emancipación… ¿o sí podremos con más creatividad y pensamiento… creando nuestros propios medios de comunicación con la gente?
Veremos; no nos van a derrotar

Gustavo González Ramella
Carta Abierta Necochea